lunes, 7 de mayo de 2018

Tokens



Tokens es una palabra inglesa que significa ficha, como aquellas de las antiguos teléfonos públicos y de los autos de choque. Quizá por este motivo es común la confusión con moneda y en el caso de este mundo de las criptomonedas es frecuente la confusión de token y criptomoneda.

Los tokens no son otra cosa que las acciones o participaciones en que está dividida el valor de una empresa como el Banco de Santander, Iberdrola o Telefónica. Los propietarios de las empresas son sus accionistas proporcionalmente al numero de acciones que posean.

Cuando una empresa reparte sus beneficios los divide por el número de acciones. Es el dividendo por acción y cada accionista recibirá una cantidad de euros igual al número de acciones que posean multiplicado por el dividendo/acción.

Cambie el nombre de token por el de acción o participación y el de holder por tenedor o poseedor de acciones o simplemente accionista y todo le resultará más claro.


Ficha de los antiguos teléfonos públicos españoles.

ICOS y Tokens


Las ICOs suelen tener varias fases. En ellas se venden las participaciones o tokens en la nueva empresa con una bonificación decreciente. Así, si en Cryptosolartech las participaciones valdrán finalmente 0,10€, en la primera fase, llamada Pre-ICO, se venden a solo 0,05€, con lo cual si dos futuros miembros de la empresa Cryptosolartech invierten la misma cantidad, el primero en la Pre-ICO y el segundo en la última fase, el primero tendrá el doble de participaciones que el segundo.

Esto tiene su importancia, porque como en toda empresa el dividendo es por acción o participación, o en estas empresas más modernas y aún traducidas a medias del inglés será dividendo/token. El primer inversor del ejemplo recibiría por dividendo doble cantidad que el segundo porque tiene el doble de tokens.


Token del Servicio Municipal de Transporte de Nueva York y otras ciudades de EEUU. Este sería un Utility Token.

Las temibles ICO


Los que entramos en el mundo de las criptomonedas, no como inversión, sino por saber algo de ellas –cómo se adquieren, cómo se paga con ellas, si verdaderamente estos pagos eran sin intermediario– descubrimos a la vez las ICO.

Las ICO no son una criptomoneda, son literalmente Ofertas Iniciales de Dinero, aunque el que ofrece el dinero no es una empresa, sino alguien que desea ofrecer dinero para que una empresa se ponga en marcha.

Detrás de estas ICOs puede haber desde simples timadores, a incurables soñadores, y a auténticos profesionales con proyectos bien pensados.

Este parece el caso de Cryptosolartech y por ello aposté por ellos. https://cryptosolartech.org/en/

Minando al sol




Nunca pensé que participaría en una empresa que se financia por medio de una ICO, pero llegó a mis manos este proyecto de Cryptosolartech que me pareció muy interesante.

La producción de monedas digitales, llamadas también criptomonedas, no se hace más o menos arbitrariamente, según las necesidades, como el euro o el dólar, lo que da lugar a que su valor sea siempre menor y a que den lugar a una inflación siempre creciente.

Las monedas digitales se extraen trabajosamente como el oro y su cuantía, como la del oro, es limitada. De ahí que su valor sea siempre creciente, que sean monedas deflacionarias. Y por esto su producción, como la del oro también, se llame minería.

La originalidad de este proyecto español es que la cuantiosa cantidad de energía para la minería de criptomonedas se obtenga del Sol, algo que en España no nos falta, especialmente en Sevilla.