Energía renovable

Una de las ideas originales que me gustó de Cryptosolartech es el uso de energía renovables. La minería de criptomonedas consume gran cantidad de energía eléctrica y es muy interesante que esta energía eléctrica sea producida con la menor contaminación posible.

Cryptosolartech produce la energía que consume en unas plantas fotovoltaica instaladas en Sevilla. Como la granja de minería está en Málaga y para paliar la variación de producción de energía eléctrica debida a la distinta radiación solar según los días, Cryptosolartech vende los kWh producidos en Sevilla a la empresa, también de energías renovables, Respira y les compra en Málaga los kWh que consumen sus procesadores dedicados a la minería.

Cryptosolartech ya ha firmado un contrato de 15 años de duración, entiendo que de compraventa de energía eléctrica.

Distribución de los tokens

Cryptosolartech constará de 1260 millones de tokens CST. Esta cantidad se distribuye en cuatro grupos. El 80%, 1008 millones de tokens, sale a la venta y estará en manos de los accionistas o socios de la empresa (token holders), y 25,2 millones de tokens, el 2%, se reparten como recompensa, en el plan de las bounties. En total 1033,2 millones de tokens estarán en manos del público.

Al final de la fase de venta, ICO, los CST no vendidos serán quemados, con lo que el porcentaje de participación de todos los socios habrá aumentado.

La empresa se queda con 189 millones de tokens para desarrollo y equipo, y 37,8 millones para marketing.

En el momento que los CST (tokens) coticen en los exchange o casas de cambio la distribución de activos puede variar y es muy posible que los 25,2 millones de CST que poseen los que acudieron al plan de las bounties o recompensas pasen a manos de los accionistas o token holders.

Las bounties

La primera vez que oí que en la etapa ICO de Cryptosolartech iban a lanzar un plan de bounties pensé en el El motín de la Bounty, navío inglés de finales del siglo XVIII, y del que se hizo una película en 1962 protagonizada por Marlon Brando.

Bounty significa generosidad y en el caso de las ICO se llama a un premio que generosamente se entrega a los que hacen propaganda del proyecto a través de las redes sociales.

La avalancha de aspirantes a las bounties, si no al motín, me recordaron a la toma de la Bastilla. ¡Qué espectáculo! Me recordó también a los antiguos bautizos en los pueblos, en los que al salir de la iglesia, los chiquillos del pueblo se arremolinaban alrededor del cortejo para recoger los caramelos y las almendras que se echaban al aire para celebrar tan feliz acontecimiento.

Esta muchedumbre que acude a recoger los tokens que se regalan en la ICO se apresuran a venderlos en el momento que se ponen en un exchange para su comercialización.

Algunos socios de la empresa en proyecto se ponen muy nerviosos porque los que recibieron los tokens en las bounties se apresuran a venderlos a cualquier precio. Tanto mejor, será un buen momento para comprar tokens a un precio menor que en la Pre-ICO.

Sobre el precio de los tokens

Ya he comentado que un token es una participación. La empresa Cryptosolartech (CST) se divide en 1.260 millones de tokens, lo que quiere decir que si un socio de la empresa posee 100.000 tokens, es propietario de 100.000*100/1.260.000.000 = 0,0079365% de la sociedad.

Estos 100.000 tokens CST le habrán podido costar distintas cantidades de euros, pues se premia si se adelanta a comprarlos en la Pre-ICO a 0,05€, en la Fase 1 a 0,06€, en la Fase 2 a 0,07€, en la Fase 3 a 0,08€ o espera al último momento y los compra en la Fase 4, y última, a 0,10€.

Las fases de la venta de tokens o acciones de Cryptosolartech, llamada ICO, termina el 1 de julio. Desde ese momento podrá haber un intercambio de tokens entre los propietarios de ellos, supongo que intercambiándose CTS (tokens) por ETH (criptomoneda) de los monederos o wallets que para la etapa ICO tuvieron que habilitar todos los participantes en el proyecto. En esta etapa el precio de los tokens CST variará según la oferta y la demanda.

En una etapa posterior los tokens CST cotizarán en distintos exchange o casas de cambio siendo su cotización pública y su compraventa similar al de las acciones de las empresas tradicionales –Banco de Santander, Iberdrola o Telefónica– en la Bolsa.

Está claro que cuánto más baratos compre los tokens o acciones el miembro de una sociedad, mayor será su beneficio relativo respecto al dinero invertido.