viernes, 11 de mayo de 2018

Equipos para la minería


Allá en un principio, en el no muy lejano 2008, bastaba bastaba la CPU de su ordenador personal para convertirse en un nodo de la red mundial de mineros. Descargaba el software necesario para esta labor y la blockchain en su disco duro y su PC comenzaba a verificar bloques, resolver el problema de hallar cual era el hash de ese bloque y conseguir que se uniera a la cadena cobrando la suculenta recompensa.

Pronto la CPU se mostró insuficiente y hubo que echar mano de las GPU (Unidad de Procesamiento de Gráficos), que todo ordenador poseía, utilizadas en los videojuegos. Por unos 120€ se podía adquirir una GPU adicional e instalarla en el PC.

A la GPU le sucedió la FPGA (Field Programmable Gate Array) que ofrecían un rendimiento similar a las GPU pero con un consumo bastante menor de energía.

Y ahora nos encontramos en la era de las ASIC (Aplication Specific Integrated Circuit). Los ASIC son son procesadores diseñados para un uso determinado. Así, tanto el procesador diseñado para un teléfono móvil como uno dedicado para la minería de bitcoin son ASIC. Su velocidad de procesamiento se mide en hash por segundo (h/s) colocando por delante el prefijo correspondiente: M, de mega (1 millón), G, de giga (1.000 millones) o T, de tera (1 billón o 1 millón de millones). Un ASIC de 15 Th/s tendrá una capacidad de procesamiento de 15 billones de hash por segundo.

Un equipo como los que pueden verse en la foto no es algo difícil de encontrar. Los puede comprar en Amazon entre 600 y 1.500 euros.